Otra vez jueves y... qué os traigo?? Una maravillosa receta que descubrí porque la hacía la madre de mi amiga Teresa. Pues resulta que cuando se la conté a mi madre me dice que era uno de sus clásicos de hace bastante tiempo y yo, claro, ni me acordaba ya!
En fin, a mí de primeras me pareció un poco rara la idea, pero la verdad es que están de muerte! Además, no tienen ninguna dificultad, así que espero que las hagáis y que me deis a probar para daros el visto bueno ;)
INGREDIENTES
- 1/2 L leche
- 1 vaina de vainilla o 1/2 piel de una naranja o de un limón
- 125 g azúcar
- 40 g Maizena (harina de maíz)
- 4 yemas de huevo
- 2 paquetes de obleas para empanadillas
- aceite para freír
- azúcar para rebozar
PREPARACIÓN
Para preparar las empanadillas tendremos que hacer primero la crema y dejar que se enfríe bien antes de montar las empanadillas. Así que hacedlo con tiempo!
Primero hay que poner la leche con la vainilla (abierta a lo largo) o las pieles de naranja y/o limón en un cazo y llevarlo a ebullición. Luego lo retiras y lo dejas enfriando.
Ahora mezcla en un bol con ayuda de las varillas, el azúcar con las yemas y la Maizena. Al principio se quedará muy compacto, pero tienes que seguir mezclando hasta que sea una crema espesa, pero no sólida.
Coge la leche, cuélala y ve añadiéndola poco a poco a la mezcla anterior sin dejar de remover.
Por último, vuelve a ponerlo en el cazo a fuego lento, removiendo todo el rato, hasta que se espese. Tardará como unos 5 o 10 min y al principio siempre parece que no está ocurriendo nada, pero de repente se espesará muy rápido, así que cuidado y no dejéis de remover!
Cuando haya espesado, retíralo del fuego, cúbrelo con un film transparente y déjalo enfriar bien.
* La crema tiene que quedar espesa, para que no se desparrame después al montar las empanadillas, pero siempre espesa mucho al enfriarse, así que tampoco hace falta dejarla en el fuego hasta que sea una roca! jaja
Ahora toca montar las empanadillas... como las de toda la vida, aquí no hay nada especial!
Coges una oblea, echas una cucharadita de crema en el centro, doblas por la mitad haciendo un semicírculo y con un tenedor, sellas el borde.
Hay gente muy apañada por ahí, que hace virguerías con los bordes, pero a mí la idea del tenedor me funciona muy bien: es rápido y eficaz! Pero mientras se quede bien cerradito, podéis hacer lazos, flores o lo que os plazca! ;)
Por último, hay que freír las empanadillas en aceite caliente y con cuidado, que si se sale un poco de crema salta mucho! Al ir sacándolas, déjalas un poco sobre papel de cocina, para que absorba parte del aceite y no se queden tan grasas, luego rebózalas en azúcar y listas para comer!
Jolín Elena así da gusto leer tu blog con estas cosas tan deliciosas.
ResponderEliminarjijiji :D A ver cuando empiezas a poner tu hamburguesotas!!
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